Por Himanshu Patel
Cualquier socio del canal informático que haya visto las cifras de mercado de la computación en la nube tiene que estar pensando “¿Y cómo puedo yo conseguir mi parte del pastel?” Pues es una pregunta muy buena y muy oportuna, y espero ayudar a responderla en este breve post.
En primer lugar, las cifras. El 5.º Informe anual sobre tendencias en la nube de CompTIA está cargado de cifras. En este informe se reproducen los datos de la empresa de investigación IDC y se separan las cifras en mercado de la nube pública y de la nube privada.
Los servicios de la nube pública incluyen varias ofertas “como servicio” –incluyendo el software (SaaS), la plataforma (PaaS) y la infraestructura (IaaS) como servicio– y en ellas los clientes acceden a una plataforma compartida. IDC afirma que este mercado supuso unos 45.700 millones en 2013 y se prevé que crezca a una tasa de crecimiento anual compuesto (TCAC) del 23% hasta 2018. ¿Crece actualmente tu negocio a esa velocidad?
En el apartado de la nube privada, que se refiere a los servicios alojados en los que hay servidores y otros recursos independientes dedicados a clientes concretos, IDC prevé que el gasto en todo el mundo supere los 24.000 millones de $ en el año 2016.
La cosa va mejorando. En su encuesta a usuarios finales, CompTIA encontró que más del 90% de las empresas estadounidenses afirman estar usando algún tipo de computación en la nube, mientras que más del 60% de esas empresas declaran que los servicios en la nube representan, como mínimo, un tercio de su arquitectura de IT global.
He aquí cómo resume el informe el escenario de la nube:
En los cinco años en los que CompTIA ha estudiado la computación en la nube, este tema ha pasado de ser un posible cambio en las reglas del juego a constituir un ingrediente esencial de las modernas IT. De hecho, la conmoción que la computación en la nube ha creado en la tecnología de back-end (tradicionalmente realizada por ordenadores centrales y servidores dentro de las instalaciones) junto con el cambio que supone la movilidad para la tecnología de front-end (tradicionalmente realizada por ordenadores de escritorio o portátiles) está abriendo las puertas a una nueva era de las IT.
CompTIA también menciona directamente a las empresas del canal informático, afirmando:
De hecho, el canal informático tiene que intensificar su juego, transformándose en algunos casos de un distribuidor directo de productos (especialmente hardware) a un proveedor multifacético de servicios y soluciones. Si bien algunas empresas mantendrán el statu quo, la mayoría cambiarán su modelo de negocio o, como mínimo, adoptarán un enfoque híbrido, añadiendo el componente de los servicios junto a una corriente de ingresos basada en los productos.
No podría estar más de acuerdo. Para mí, la gran pregunta a la que se enfrentan los socios del canal informático es decidir qué mercado seguir.
Considero que el mercado de la alimentación de respaldo y de la recuperación tras desastres (RD) es el medio natural para la nube. Igual que muchos servicios en la nube, viene de la mano del paso a la virtualización que ha estado teniendo lugar desde hace algún tiempo. La virtualización ha facilitado mucho a las empresas contar con elementos de respaldo para su entorno de servidores listos para enviarse a una ubicación fuera de sus instalaciones.
Puesto que muchas empresas, especialmente las pequeñas y medianas, no pueden permitirse tener un segundo Data Center físico de respaldo, la nube se ha convertido en una opción muy atractiva. De repente, las pymes pueden tener el mismo nivel de respaldo y de recuperación que sus hermanas mayores, y por tan solo una pequeña parte de su precio. Pero también las empresas grandes están buscando un respaldo y una RD basados en la nube como una opción menos costosa que la gestión de múltiples Data Centers, además de querer expandir el alcance de sus iniciativas de respaldo y de RD.
El desarrollo de aplicaciones es otra área que está lista para incorporarse a la nube. Si antes las empresas tenían que dedicar servidores específicos para el desarrollo de aplicaciones, incluyendo servidores no conectados a la red de producción para realizar pruebas, ahora todo eso puede realizarse en la nube. Y, además, es fácil replantear los recursos de la nube. Una vez que se ha terminado un proyecto, la empresa puede usar fácilmente los mismos servidores para el nuevo proyecto, o simplemente dejarlos inactivos si no los necesita y ahorrarse así el dinero.
Las ofertas de servicios móviles son otra opción natural, tanto si se trata de comunicaciones unificadas como de aplicaciones de empresa, por ejemplo, la gestión de las relaciones con el cliente (CRM) o la planificación de recursos empresariales (ERP). Con la nube, pueden prestarse esos servicios a los clientes sin importar dónde estén o qué dispositivo usen. Se trata más o menos de una solución inmediata a todo el fenómeno de la corriente “trae tu propio dispositivo” (BYOD, por sus siglas en inglés).
No importa qué ruta se siga para llegar a la nube; sin embargo, es necesario asegurarse de que se posee la infraestructura adecuada para garantizar que tus servicios sean altamente fiables y seguros y estén totalmente disponibles. Como bien sabes, la oferta de APC by Schneider Electric está dedicada a garantizar la fiabilidad, la disponibilidad y la seguridad, y eso es algo que no cambia con el auge de la nube.
En mi próximo post, explicaré con más detalle cómo APC by Schneider Electric puede ayudar a sus socios a realizar la transición a una oferta de servicios gestionados basados en la nube y obtener así su parte en los miles de millones que los clientes están invirtiendo. Mientras tanto, echa un vistazo al 5.º Informe anual sobre tendencias en la nube de CompTIA para que te sirva de inspiración.